Muchas parejas ansían poder transformarse en padres y cuando reciben la enorme novedad, empiezan a vivir el instante más feliz de su historia.
Con adelanto, empiezan a elaborar todo para lograrofrecerle la bienvenida de la preferibleforma. Pintan su cuarto, compran ropa y pañales, opínan en el nombre que va a llevar e imaginan como va a ser su carita.
No obstante, aunque tengas todo muy bien premeditado, siempre puede ocurrir lo impensado, como es la situacion de esta pareja. Para Kirsty Alexander, una mujer de 33 años oriunda de Inglaterra, la alegría de tener trillizos se transformó en una horrible pesadilla.
“Las primeras semanas luego de ofrecer a luz fueron horribles. No podía salir de casa porque tenia bastante miedo de que les pasara algo a los niños recién nacidos que sobrevivieron.
Me aconsejaron que intentara comunicar mis emociones, pero no tenia la fuerza para ver a alguien y mencionarle lo que había experimentado. Fue entonces cuando comencé a comunicar mis pensamientos y sentimientos en Instagram.
Fue más simple porque no tuve que comentar con nadie en persona, pero tuve acceso a personas amables que tuvieron experiencias semejantes conmigo. Las expresiones de consuelo que me brindaron me han ayudado a salir de la peor circunstancia de mi vida”.
Kirsty y su marido John tenia una hija llamada Bonnie, quien fue concebida por medio de fertilización in vitro gracias a algunos inconvenientes de fertilidad que tenia el hombre.
Cuando han recibido la novedad de que habían concebido a trillizas de forma natural estaban espectacularmente contentos y no podían creerlo.
“Sentí que se encontraba embarazada inclusive antes de llevar a cabo la prueba y la barriga nació muy de manera rápida.
Cuando me dijeron en la primera ecografía que tendría tres niños recién nacidos, he llorado y reí simultáneamente. Fue una enorme emoción.”
Lamentablemente, a lo largo de su ecografía número 18, el médico notó que uno de los niños recién nacidos no se se encontraba construyendo como esperaba. Para la semana 20 de embarazo el corazón del niño recién nacido había dejado de latir. La niña llamada Dotty había perdido la vida dentro del vientre de su madre.
Por otro lado, la mujer tomo la decisión de seguir y los doctores debieron considerar la situacion. Como esto no suponía un compromiso para las otras dos pequeñas ni para la madre, todo siguió igual y Kirsty dio a luz a los chicos Deliah, Wilfred y a Dotty.
“Amamos a todos los niños recién nacidos desde el instante en que descubrimos que estábamos embarazadas de trillizos. Imaginé cómo serían su fachada y personalidad y, más que nada, imaginé cómo sería tenerlos seguro en mis brazos”.
Las trillizas nacieron por cesárea a las 36 semanas de gestación. La madre, comentó en sus comunidades que el parto fue uno de los instantes más trágicos que vivió.
“Mientras llevaba a Dotty dentro de mí, sentí que se encontraba segura y cuidada, pero sabía que cuando diera a luz pasaría por consiguiente mal. Profundo como el instante en que me enteré de que había fallecido. He llorado bastante por la iniciativa de que podría estar sola. Por eso compré un conejito de peluche que abracé toda la noche antes de la cesárea, para que cuando me quitaran a Dotty, pudiera estar con el animalito con mi olor”.
La narración de Kirsty se realizó popular debido a que ella misma ha compartido su historia en sus redes sociales. Después de que contó por todo el desarrollo que tuvo que pasar, han comenzado a llegar cientos de comentarios de acompañamiento. Esta madre, afirma que las muestras de cariño de esos raros fueron muy indispensables para ella para que pudiera salir adelante.